Durante una sesión de respiración consciente y conectada, que recordemos es la que utilizamos en Rebirthing, el objetivo del renacedor es saber guiar correctamente a la persona hasta llegar al ciclo energético, y saber acompañarle adecuadamente a atravesar todas las sensaciones y manifestaciones que puedan aparecer durante el mismo, para finalmente integrarlas con mucho amor.
El ciclo energético es ese momento mágico, único e inspirador en el cual se fusionan inhalación y exhalación y conectamos con la energía a través de la respiración y nos entregamos completamente al poder sanador del prana.
A lo largo de una sesión podemos tener un solo ciclo energético, o varios, dependiendo de lo que la persona esté preparada para procesar en cada momento, ya que, cómo hemos comentado en otros artículos, nunca conectamos con nada que no estemos preparados para soltar, y con cada sesión, el nivel de confianza y entrega de las personas va aumentando paulatinamente y por lo tanto se permiten ir llegando más y más lejos.Por propia experiencia conmigo mismo, y teniendo como tengo el privilegio de acompañar a muchas personas en sus procesos, puedo decir que cuando aparece más de un ciclo energético durante una misma sesión, la intensidad de los mismos va aumentando con respecto al anterior. Es habitual que algunas personas tengan (tengamos) un primer ciclo energético muy sutil, para al cabo de unos minutos tener otro u otros mucho más poderosos y liberadores. Cuanto más capas de tensión física, mental y emocional vayamos atravesando, más poderosos y placenteros serán nuestros ciclos energéticos.
Un ciclo energético puede durar unos segundos, o puede alargarse durante horas dependiendo de nuevo del momento de cada persona.
Hay personas que lo han definido como “experiencia liberadora y de toma de conciencia”, otras como “conexión con la energía universal a través de la respiración” , y otras como “orgasmo cósmico”. Hay tantas definiciones como personas. Sea como sea, es una experiencia hermosísima que todo el mundo debería experimentar a lo largo de su vida.
Luis F. Gómez
